Efectos de los neumáticos sobre la seguridad

Todas las fuerzas de dirección, frenado y aceleración entre un vehículo y la carretera se transmiten a través de los neumáticos. Los neumáticos son el equipamiento de seguridad más activo de su automóvil, este se mantiene en la carretera y bajo su control mediante cuatro zonas de contacto del tamaño de la palma de la mano.

La función de los neumáticos en la seguridad de un automóvil se vuelve más importante con unas condiciones exigentes y rápidamente cambiantes: en nieve o hielo, en una carretera mojada o en situaciones inesperadas.

Una banda de rodadura y presión adecuadas son vitales para la funcionalidad de los neumáticos. Si los neumáticos están desgastados, el agarre en mojado y las propiedades de aquaplaning se deterioran y aumenta el riesgo de accidentes. La falta de presión suficiente en los neumáticos dificulta el control del coche en situaciones extremas y hace que la dirección se desvíe hacia un lado. Una presión insuficiente puede incluso provocar un reventón.

Las difíciles condiciones del norte exigen mucho a los neumáticos. El neumático debe mantener el agarre en la carretera incluso con malas condiciones meteorológicas. La superficie de fricción de la carretera en invierno varía entre el coeficiente fraccionario 0.1 para el hielo húmedo y el coeficiente de casi 1 para el asfalto seco. Además del agarre absoluto, una relación correcta entre el agarre lateral y longitudinal garantiza unas buenas propiedades preventivas y respuesta de la dirección en una tormenta de nieve o un aguanieve acuoso.